Depresión: síntomas y tratamiento

Al hablar o pensar en la depresión, las personas solemos asociarla inmediatamente a un episodio de tristeza severo. Sin embargo, la depresión es mucho más que eso: se trata de una enfermedad mental grave que afecta la calidad de vida de quienes la padecen.

En este artículo, queremos explicarte en profundidad qué es la depresión: cuáles son los síntomas y los tipos de depresión que existen, cuáles son los factores de riesgo que aumentan las probabilidades de sufrirla y qué medidas se pueden tomar para prevenirla, así como los posibles tratamientos.

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¿Qué es la depresión?

La depresión clínica es una enfermedad física y mental. Se caracteriza por presentar sentimientos de tristeza, apatía e infelicidad durante largos periodos de tiempo. Cuando una persona padece esta afección, sus relaciones personales (la vida familiar, el vínculo con su pareja o su grupo de amistades) y su desempeño laboral pueden verse afectados. Además, actividades básicas como comer o dormir también pueden verse modificadas.

La depresión impide que las personas puedan disfrutar plenamente de su vida. Fuente: Unsplash.

Las causas de la depresión son diversas. Según el Instituto Nacional de la Salud Mental de EE. UU. (NIMH, por sus siglas en inglés), la combinación de dos o más factores genéticos, factores biológicos, factores ambientales y psicológicos puede contribuir a desarrollar esta condición.

Síntomas de la depresión más comunes

La depresión presenta una amplia variedad de síntomas. Algunas personas pueden manifestar uno o dos síntomas característicos, mientras que otras pueden presentar muchos en simultáneo.
Algunos de los síntomas de la depresión son:

• Sentimientos de tristeza: la persona se siente abatida y con ganas de llorar todo el tiempo.
• Irritabilidad: al estar deprimida, es casi inevitable que la persona no se sienta molesta, nerviosa y sufra de ataques de enojo, incluso ante hechos que pueden parecer de poca importancia.
• Alteraciones en el sueño: en algunas personas este síntoma se presenta como insomnio, mientras que en otras se presenta como un deseo intenso de dormir todo el tiempo.
• Pensamientos negativos: la persona percibe el futuro como desesperanzador y de manera negativa. Con frecuencia hay una pérdida de interés por las actividades que antes solía disfrutar.
• Cansancio y falta de energía: las actividades habituales se vuelven agotadoras.
• Sentimientos de culpa: este sentimiento lleva a que la persona se cuestione por errores o elecciones pasadas, se haga autorreproches y sienta que no hace las cosas bien.
• Falta de apetito: uno de los síntomas biológicos incluye la falta de deseo por la comida y la pérdida de peso.
• Lentitud: tanto para realizar movimientos motrices como para procesar información y elaborar respuestas.
• Pensamientos recurrentes sobre la muerte: otro de los síntomas depresivos son los pensamientos frecuentes sobre la muerte o, incluso, los intentos de suicidio.
• Problemas físicos sin explicación: pueden aparecer dolores de cabeza, de espalda, bruxismo, contracturas, etc.

¿Quién puede tener depresión?

La depresión afecta tanto a adultos como a infantes y adolescentes. Sin embargo, según la edad y la etapa de la vida que la persona esté atravesando, pueden darse diferentes tipos de depresión (por ejemplo, la depresión posparto) o manifestar diferentes síntomas, como un bajo rendimiento escolar durante la infancia y la adolescencia.

Depresión durante la infancia y la adolescencia

Durante la infancia, al igual que durante la etapa adulta, se tienen miedos y preocupaciones. Por ejemplo, es muy común que los infantes se despierten llorando por la noche ante el temor que les provoca estar separados de sus padres. Sin embargo, ante un cambio de conducta severo, como mostrar apatía u hostilidad ante los demás, la recomendación es buscar la ayuda de un profesional de la salud mental para determinar si se podría tratar de un episodio de depresión. Algunos síntomas de la depresión en adolescentes e infantes son:

• Dificultad para concentrarse
• Bajo rendimiento académico
• Conflictos con su grupo de amistades
• Tener baja autoestima
• Hostilidad y apatía

Depresión en hombres y mujeres en edad adulta

Aunque tanto hombres como mujeres pueden sufrir de depresión, ambos la experimentan de manera diferente. Si bien diversos estudios señalan que la depresión es más frecuente en las mujeres que en los hombres, las mujeres suelen buscar ayuda médica y hablar de sus emociones con mayor facilidad. Los hombres, por su parte, tienden a somatizar o a recurrir al abuso de sustancias para aliviar los síntomas

Por lo general, la depresión en los hombres puede presentar algunos de estos síntomas:

• Pensamientos suicidas
• Consumo de alcohol o de drogas
• Comportamiento violento
• Problemas con la libido y el rendimiento sexual
• Participación en actividades de alto riesgo

La depresión en las mujeres por su parte, puede manifestar algunas de estas señales:

• Anhedonia (incapacidad para sentir placer)
• Sentimientos de culpa
• Insomnio
• Variación extrema en el peso corporal
• Cambios hormonales (falta o variación de la menstruación)

Depresión en personas mayores

Las personas mayores experimentan cambios muy importantes, no solo físicos, sino también psicológicos que pueden contribuir a que sufran de depresión. Muchas veces se atribuyen erróneamente los síntomas de la depresión a la edad, pues se asume que el comportamiento es propio de una persona mayor. Es importante reconocer los síntomas de esta enfermedad y ofrecerle a la persona el tratamiento adecuado para mejorar su calidad de vida. La depresión en las personas mayores se caracteriza por lo siguiente:

• Irritabilidad y lentitud
• Aburrimiento, apatía e indiferencia
• Alteración en el sueño y fatiga
• Pesimismo
• Dolor crónico sin causa aparente

La depresión afecta a personas de todas las edades. Fuente: Unsplash.

Cabe destacar que los síntomas mencionados no son exclusivos a un sexo o a una edad, a excepción de algunos síntomas relacionados con factores biológicos

Es decir, una mujer podría presentar un comportamiento agresivo o abusar de sustancias, así como un hombre puede presentar insomnio. Sin embargo, a nivel general, los síntomas enumerados en cada apartado suelen ser los más frecuentes para ese sexo o esa edad.

Tipos de depresión

Según la intensidad de los síntomas, la etapa o el factor desencadenante, se habla de uno u otro tipo de depresión.Así, por ejemplo, se denomina trastorno disfórico premenstrual a la depresión severa que algunas mujeres sufren en los días previos a la menstruación y depresión mayor a aquella cuyos síntomas son muy intensos y duraderos.
A continuación te contamos, brevemente, cuáles son algunos de los tipos de depresión más frecuentes.

Trastorno depresivo mayor

La depresión mayor, tal como lo expresa su semántica, es el tipo de depresión más grave. Los síntomas son intensos y persistentes. Sin embargo, la persona puede alternar entre fases de estado de ánimo sin síntomas depresivos y episodios depresivos que duran semanas o meses. Este tipo de depresión suele comenzar durante la adolescencia o los primeros años de la edad adulta

Trastorno depresivo persistente o distimia

La distimia es un tipo de trastorno unipolar; es decir, un tipo de trastorno en el cual no hay episodios de manía o hipomanía (como en el caso del trastorno bipolar). En este tipo de depresión, la persona tiene sentimientos de tristeza, falta de propósito y de motivación durante gran parte del día. A su vez, estos sentimientos pueden mantenerse durante un periodo largo de tiempo (al menos dos años). Sin embargo, a diferencia de la depresión mayor, los síntomas son menos intensos y suponen un riesgo relativamente menor. Muchas personas con distimia pueden sufrir de depresión mayor en algún momento de su vida.

Trastorno afectivo estacional

El trastorno depresivo estacional (SAD, por su nombre en inglés) es un trastorno del estado de ánimo que afecta el bienestar de la persona y se caracteriza por ocurrir durante una determinada época del año, generalmente en invierno. En un estudio llevado a cabo en 1984 por The British Psychological Society, se analizó a un grupo de hombres durante once días. Al finalizar el periodo, se concluyó que factores como la humedad, la temperatura y las horas de luz afectaron considerablemente el humor de los sujetos estudiados.

La depresión afecta a personas de todas las edades. Fuente: Unsplash.

Los síntomas de este trastorno son similares a los de otros tipos de depresión: tristeza, desesperanza, aumento del sueño, aislamiento social, irritabilidad, etc.

Trastorno bipolar

Este tipo de depresión psicótica, conocida también como depresión maníaca y trastorno maníaco depresivo, combina estados depresivos con altibajos de conducta extremos. En otras palabras, los periodos de tristeza y depresión pueden alternarse con episodios de excitación y actividad intensa. El tratamiento para esta condición es diferente al de la depresión unipolar, pudiendo combinar el uso de fármacos junto con psicoterapia realizada por un profesional de salud mental.

Tratamiento de la depresión

La depresión es uno de los trastornos mentales más frecuentes.Aunque existen tratamientos efectivos para tratar y aliviar sus síntomas, según cifras arrojadas por la Organización Mundial de la Salud, en algunos países, más del 90% de las personas afectadas no recibe dicho tratamiento.

Reconocer los síntomas, así como los factores de riesgo y de prevención, puede ser de gran utilidad para encontrar la ayuda necesaria en etapas tempranas de la enfermedad.

Factores y prevención

Los factores desencadenantes de la depresión son diversos. Cada persona, desde su individualidad y su experiencia de vida personal, puede presentar diferentes factores. Incluso, existen factores genéticos. La lista de los factores de riesgo más comunes incluye:

• Situaciones o hechos estresantes en la vida de la persona: pérdida de trabajo, fallecimiento de un familiar, problemas económicos, etc
• Sufrir de otros trastornos psicológicos, por ejemplo, ansiedad
• Alcoholismo y consumo de drogas.
• Estrés continuo.
• Tener problemas para relacionarse socialmente.
• Tener antecedentes de depresión en la familia.
• Cambios hormonales (como aquellos que se dan en el posparto).
• El consumo de algunos medicamentos.

Algunas de las cosas que pueden ayudar a prevenir la depresión son:

• Mantener una rutina de ejercicio a largo plazo.
• Mantener una rutina de vida ordenada.
• Consumir alimentos saludables.
• Ante una dificultad, buscar apoyo en los seres queridos.
• Realizar terapia con un especialista.
• Evitar el consumo de drogas y alcohol.
• Descansar bien.
• Practicar actividades que inviten a la relajación (yoga, pilates, taichi, etc.)

Buscar apoyo y hablar con nuestros seres queridos puede ayudarnos a prevenir la depresión. Fuente: Unsplash.

Atención médica y profesionales de la salud mental

Si bien la depresión es una enfermedad mental grave, los profesionales de la salud mental están preparados para asistir y acompañar a la persona afectada

• Atención médica Ante la presencia de uno o varios de los síntomas que mencionamos anteriormente, sobre todo si el malestar incluye síntomas físicos, deberías hacer una consulta con tu médico de cabecera. Los médicos de atención primaria pueden ayudar con el diagnóstico, ofrecer tratamientos rutinarios y referir a la persona a un profesional de la salud mental, como psicólogos o psiquiatras.
• Profesionales de la salud mental.El psicólogo o psiquiatra hará un análisis detallado de los síntomas, su frecuencia, duración e intensidad, así como qué tanto afectan estos síntomas al desempeño cotidiano de la persona. Posteriormente, le ofrecerá a la persona el tratamiento adecuado en concordancia con la rama de la psicología en la cual se desempeñe (terapia ognitivo conductual, psicoterapia interpersonal, etc.). De ser necesario, le recetará al paciente medicamentos para complementar el tratamiento.

La depresión: el reconocimiento que se merece

La depresión es más que un estado de ánimo crónico. Reconocerla como una de las enfermedades mentales más comunes ayuda a eliminar los estigmas que la rodean y a alentar a quienes la sufren a obtener la ayuda necesaria.Recuerda: si tú o algún ser querido sufre de depresión, hay ayuda disponible. Con el tratamiento adecuado es posible aliviar el malestar y recuperar la positividad y las ganas de disfrutar de la vida.