Flor viviana mireles rivera
Tuve la fortuna de contar con el acompañamiento de María Rojas Henao como mi terapeuta, y no podría estar más agradecida por el proceso vivido junto a ella. Desde el primer momento, se mostró profesional, dedicada y muy atenta, generando un espacio seguro en el que pude hablar con libertad y sin juicios. Su forma de ser tan cercana y empática hace que sea mucho más fácil hablar con ella, incluso sobre temas que antes me costaba muchísimo expresar. María no solo escucha, sino que también guía con herramientas concretas, materiales y tareas que realmente ayudan a trabajar en uno mismo. Gracias a su apoyo, logré afrontar y aceptar problemas que venía cargando desde hace mucho tiempo, aprendiendo a llevarlos sin que me afecten como antes. Más allá de su conocimiento, lo que más valoro es su compromiso con el bienestar de sus pacientes. Se nota que ama lo que hace y que lo hace con el corazón. La recomiendo con total confianza a cualquier persona que esté buscando una terapeuta empática, constante y profundamente humana.